El inmenso territorio de Rusia sirvió de cobijo al tesoro del Faraón Kkita II desde que emigró de Francia.

Traza la línea que va desde París a Moscú para seguir el recorrido del tesoro.

Los duros inviernos de esta zona del planeta contrastan con las cálidas temperaturas de Egipto. Los secuaces de Kkita II pensaron que allí no tendrían problemas para proteger el tesoro de las investigaciones de los exploradores que pretendían descubrir su localización. No pensaron que Rusia entraría en guerra contra Alemania de Hitler, que también pretendía hacerse con el tesoro. En Stalingrado tendría lugar una de las más duras batallas de la II Guerra Mundial cuando el tesoro fue evacuado definitivamente a tierras más tranquilas.

Responde a las preguntas sobre la II guerra Mundial que tienes en el cuaderno del explorador.